Apatzingán, Michoacán a 22 de octubre de 2024.- Alma Rosa Bahena Villalobos, Magistrada Presidenta del Tribunal Electoral del Estado (TEEMich) fue recipiendaria de la Presea del Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana de 1814, en el CCX aniversario de la Constitución de Apatzingán, de manos del Gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, en Sesión Solemne de la 76 Legislatura del Congreso del Estado.
En su discurso, Bahena Villalobos reconoció a las mujeres que lucharon a la par con los hombres, como José María Morelos para mantener viva la llama del movimiento independentista, quienes fungieron como mensajeras, espías, aliadas y combatientes.
Ante Juan Antonio Magaña de la Mora, Diputado Presidente de la Mesa Directiva del H. Congreso del Estado, Fabiola Alanís Sámano, Diputada Presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso, diputadas y diputados de la 76 Legislatura del Congreso del Estado, agradeció “a todas y todos quienes me consideraron digna de esta distinción”, en el día que se conmemora el 210 aniversario de la sanción de la Constitución de Apatzingán de 1814, primer Constitución de México y de América, inspirada en los Sentimientos de la Nación redactados por quien lideró la segunda etapa de la lucha por la independencia de nuestro país, el Generalísimo Don José María Morelos y Pavón.
Bahena Villalobos recordó que si bien, no hay registros precisos de las mujeres que participaron directamente en el Congreso de Anáhuac, es sabido que un número importante de ellas, apoyó activamente la causa independentista. Refirió que dichas mujeres, desempeñaron un papel fundamental en la lucha por la independencia, aunque su valiosa contribución ha sido a menudo pasada por alto en la historia tradicional.
Alma Bahena enfatizó en revivir la memoria de aquellas heroínas de la independencia, de nombres apenas susurrados y de otros olvidados que, junto con los grandes hombres reconocidos en nuestra historia nacional, como lo es el insurgente Morelos, ellas también lucharon por darnos un país más justo, equitativo y libre.
“Reconozco la importancia de esta presea, por ello, agradezco nuevamente por considerar a una servidora, merecedora de la misma, la recibo a nombre de todas aquellas mujeres anónimas de la independencia que merecen nuestro reconocimiento y de todas las demás mujeres que la historia no cuenta, pero que gracias a sus aportaciones y de las de aquellos hombres solidarios con las causas de las mujeres, han logrado que hoy, tengamos reconocidos nuestros derechos humanos, incluidos los de corte político-electoral, gracias a los cuales, México cuenta actualmente con un número equitativo en la mayoría de los cargos de elección popular, incluyendo desde luego, a su primera Presidenta del país”. Se comprometió en su quehacer como juzgadora local en materia electoral, “a refrendar mi compromiso con la ciudadanía michoacana para continuar ampliando y garantizando los derechos político – electorales de los grupos más desaventajados, en pro de las personas de los pueblos y comunidades indígenas, de las mujeres en ejercicio de sus derechos políticos, de quienes conforman la comunidad de la diversidad sexual, de las personas con discapacidad y en general, de todas las personas que, como lo afirmó el Siervo de la Nación: _que todo aquél que se queje con justicia, tenga un tribunal que lo escuche, lo ampare y lo defienda contra _el fuerte y el arbitrario_ ”, y teniendo como referente a uno de los principios que se desprende de los Sentimientos de la Nación: el que no se distinga a una persona de otra, más que por sus virtudes”.
Dijo “recibir el reconocimiento con mucho orgullo y humildad, con el corazón lleno de gratitud, con compromiso con mi Estado, con mi país y con conciencia de que una persona en lo individual no podría ser merecedora de tan valiosa distinción. Son mi inspiración todas las mujeres que han formado parte de la lucha por la igualdad de género quienes en el camino se han vuelto amigas; así como en la entrega de muchas mujeres que por siglos han creído que una vida de inclusión y libre de violencia es posible y en sus respectivas épocas, no pudieron ver el México y el Michoacán de hoy, en el que las mujeres somos parte importante en la vida pública y política de nuestro país y de nuestro Estado”.